
CARLOS LEÓN
La Presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, presentó en la “Mañanera del Pueblo”, el Plan Estratégico 2025-2035 de Pemex y destacó que, a partir de 2027, Petróleos Mexicanos tendrá suficientes ingresos para pagar su deuda y presupuesto para inversiones. La presidenta destacó que el Plan Estratégico de Pemex tiene como objetivo de desendeudar a Petróleos Mexicanos, producir 1.8 millones de barriles diarios de petróleo, e incrementar la producción petroquímica y de gas.
Petróleos Mexicanos fue fundada el 7 de junio de 1938 por el presidente Lázaro Cárdenas tras la expropiación petrolera, nacionalizando la industria y convirtiendo a Pemex en la única empresa encargada de exploración, explotación, refinación y comercialización del petróleo en México. La expropiación marcó un hito en la historia de México, sin embargo, Pemex enfrentó desafíos técnicos, la industria petrolera estaba en manos de empresas extranjeras y estaban seguras que México no podría continuar con su manejo y explotación. La formación de ingenieros, técnicos y trabajadores calificados fue esencial para operar la empresa y desarrollar tecnología nacional. La primera etapa consistió en lograr la “sobrevivencia” de la industria. A pesar del cierre de las fuentes internacionales de abastecimiento de equipo, se repararon las plantas existentes, fabricándose piezas de repuesto en los talleres y rehabilitándose a adaptar las refinerías a las necesidades del mercado interno. Actualmente México cuenta con 8 refinerías operadas por Pemex: Cadereyta, Salamanca, Madero, Salina Cruz, Minatitlán y Tula, además de Deer Park en Texas y la nueva refinería Olmeca de Dos Bocas en Tabasco. Durante años, las refinerías no recibieron la inversión necesaria para su mantenimiento y modernización, lo que resultó en un deterioro de su infraestructura y capacidad operativa. La baja producción de combustibles -sólo el 30% de su capacidad de refinación- implica un alto costo económico para el país, así como una pérdida de ingresos por exportación de crudo. En junio de 2024, se importaron 539 mil barriles diarios de gasolina y 287 mil barriles diarios de diésel. El valor de las importaciones de gasolina de Pemex en Mayo de 2025 ascendió a $937 millones de dólares, un aumento mensual del 4% de acuerdo a Bloomberg. Las importaciones de gasolina representan más de la mitad del consumo nacional en México, estimado en alrededor de 800 mil barriles diarios, según la Secretaría de Energía. El costo de la importación en México varía anualmente y depende de varios factores como los precios internacionales del petróleo, la tasa de cambio y los impuestos aplicados. En 2024 México importó gasolina por un valor de 50 mil millones de dólares, según el Banco de México.
“Ellos quebraron la empresa, los gobiernos del PRIAN. Con Vicente Fox, se llegaron a producir 3.2 millones de barriles diarios. El precio actual del petróleo está sobre los 63 dólares. En aquella época estaba a más de 100 dólares. Ingresos petroleros hubo muchísimos. Excedentes también, porque además ponían en el Presupuesto algo y después tenían excedentes. ¿Dónde se quedó ese dinero? En Pemex no”, recordó la Presidenta en la “Mañanera del Pueblo”. “A Calderón, le tocó más o menos lo mismo. Ahora, qué provocaron además, irresponsablemente el decaimiento del mejor yacimiento petrolero que ha tenido México, que es Cantarell. Se les ocurrió inyectar nitrógeno y el gas está contaminado con nitrógeno. Pésimas decisiones, además eso sí era oscurantismo del neoliberalismo” añadió. “Enrique Peña llega y dice: “Hay que privatizar todo, dejar entrar abiertamente a todas las empresas”. De 2000 a 2012, el país obtuvo del crudo de Pemex 7 billones 753 mil 200 millones de pesos. Sin embargo, de ese monto extraordinario no se sabe nada, debido a la corrupción y falta de rendición de cuentas.
La rehabilitación de las 6 refinerías ha requerido una inversión significativa y se estima que la inversión total podría superar los 16 mil millones de dólares. Desde el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador el objetivo ha sido que el país logre la autosuficiencia en la producción de combustibles. Que México deje de vender petróleo crudo y comprar gasolinas. Asimismo, la construcción de plantas coquizadoras, específicamente en las refinerías de Tula, Hidalgo y Salina Cruz Oaxaca, forman parte de la misma estrategia para alcanzar la autosuficiencia en combustibles y reducir la dependencia de gasolina y diésel. Estas plantas procesarán el combustóleo, un residuo de la refinación, para convertirlo en gasolina y diésel, disminuyendo la producción de combustóleo y reduciendo el impacto ambiental.
Dentro de la dependencia energética -que todavía tenemos-, el director de Pemex, Víctor Rodríguez Padilla, ha expresado su preocupación por la alta dependencia del gas natural para la generación de energía eléctrica en México, donde más del 60% de la electricidad depende de este combustible. Además, ha recordado que, en el pasado, Estados Unidos ha restringido el suministro de gas a México, lo que evidencia la vulnerabilidad del país. La situación se agrava por la creciente demanda de gas natural en México, mientras la producción nacional no ha logrado cubrir las necesidades del país, lo que ha llevado a un aumento en las importaciones y se agrava aún más por quien se encuentra en la silla presidencial en los Estados Unidos. Por lo tanto, Pemex ha propuesto diversificar las fuentes de suministro de gas y explorar nuevas reservas nacionales para reducir la dependencia de Estados Unidos y garantizar la seguridad energética del país.
A respuesta del Plan Energético de Pemex, Donald Trump ha dejado claro que “México debería de pagar las consecuencias si deja de comprar combustible estadounidense”. Podría establecer aranceles a las exportaciones mexicanas si las exportaciones de energía desde los Estados Unidos se ven afectadas por el Plan de la presidenta Sheinbaum. El Plan Energético tiene como objetivos, además de bajar la deuda de Pemex un 35% en los próximos 5 años, reducir progresivamente la compra de combustibles refinados a Estados Unidos, que actualmente representa más del 60% de nuestra gasolina. Además de las refinerías norteamericanas que están muy preocupadas por perder su jugoso negocio con México. El crimen organizado también está intranquilo y ocupado en defender su lucrativo comercio. Después del operativo Reynosa que decomisó 1.8 millones de litros de hidrocarburos, 12 motobombas y 39 tanques móviles; el crimen lanzó una granada contra un funcionario de Tamaulipas, de la Fiscalía General de la República que combatía el robo de hidrocarburos en la frontera. Desde hace 10 años el crimen organizado mexicano pasó de ser unicamente traficante de drogas, a ser, un operador logístico de robo de hidrocarburos para los norteamericanos. De acuerdo a la Secretaría de Energía, el huachicol representa una pérdida anual de más 15 mil millones de pesos y del robo de hidrocarburos un 40% termina vendiéndose a los Estados Unidos de manera ilegal.
México tiene en sus manos -no de manera fácil- la soberanía energética y debe seguir mandando mensajes claros de su lucha contra los cárteles y sus negocios de drogas, huachicol y extracción de minerales; además de la erradicación de la corrupción y la inversión en otras energías que sean limpias y complementarias. Ya se han visto los ejemplos, en todo el mundo, de qué sucede con las energías en manos privadas, sólo conducen a un encarecimiento en aras de la ganancia y en obvio detrimento de la economía de la población. Y como siempre terminamos con un dichos populares: “El que se alegra del mal del vecino, el suyo le viene de camino” “El hombre mezquino, en cada barrio es vecino” y “Un mal vecino es peor que una mala tormenta”.
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