PULSO/ Los espejos del Palacio

EDUARDO MERAZ

Al inicio, la imagen reflejaba al triunfador, casi el rey de todo el mundo. Casi seis años después, los mismos espejos muestran la decrepitud ideológica de quien encabeza un gobierno desvencijado, maltrecho e inoperante, sin haber podido solucionar alguno de los grandes y graves problemas nacionales.

Ensoberbecido por la mayoría inicial en el Congreso, el presidente totalmente Palacio Nacional abandonó principios y compromisos económicos, políticos y sociales, aunque de dientes para afuera hable de una variante de humanismo -mexicano- que, en los hechos, quedó muy distante de poder garantizar a la población seguridad, educación y salud.

Al contrario, la violencia, los muertos, los desaparecidos, el despilfarro en obras faraónicas y servicios públicos en condiciones deplorables son el signo distintivo de su administración. Y consciente de sus limitaciones, prefiere culpar al pasado, así como ofender y denigrar a quienes dan cuenta de la realidad, ajena a la ofrecida en los espejos palaciegos.

A cambio de la insustancial benevolencia con la cual trata al pueblo bueno y sabio -vía las dádivas de los programas sociales-, dejará un legado caracterizado por los altos estándares de corrupción, cesión de territorio al crimen organizado de manera proporcional a la militarización de actividades productivas y una creciente carga financiera para pagar los seis Fobaproas aprobados durante su gestión.

Por eso llama golpistas a los padres de los centenares de niños con cáncer fallecidos por falta de medicamentos; llama clasistas y racistas a las clases medias, aunque si a alguien le ajustan perfectamente tales calificativos es a los cuatroteístas que, desde el Olimpo región 4T miran por encima del hombro a los demás, aunque su papel solo les alcance para caravanear y lanzar loas al mandatario sin nombre y sin palabra.

Son millones los complotistas que, desde su distorsionada perspectiva, están contra su administración; se trata de las víctimas de fenómenos naturales, la violencia, las desapariciones.

Ejemplos emblemáticos son los casos de los estudiantes de Ayotzinapa, negándose a mandar a analizar los restos encontrados en el basurero de Cocula. En contraste, en menos de 24 horas, los peritos de la Fiscalía de Justicia de la Ciudad de México decretaron que los restos encontrados en la alcaldía de Iztapalapa eran de animales.

Tal eficiencia y velocidad para descalificar a la madre buscadora Ceci Flores, la deberían haber aprovechado para de una buena vez deslindar responsabilidades en el caso de Iguala. El desaseo en la actuación de la FGJCDMX es similar al que se atribuye a Tomás Zerón, con el fin de obtener una “verdad histórica” para Iztapalapa, para no dañar las campañas de Claudia Sheinbaum y Clara Brugada.

Así la arrogancia y la soberbia presidenciales que, alimentada por sus súbditos, volvió intolerante y grosero al habitante temporal de Palacio Nacional. Ese sentirse superior a cualquiera, lo encegueció y no fue capaz, nunca más, de aceptar observaciones y mucho menos críticas a su gestión

De tanto mirarse y regodearse en la cornucopia transformadora, no quiso darse cuenta de la transfiguración sufrida al paso de los días y embelesado por el poder adoptó las actitudes y gestos de sus antecesores a los cuales, muy en el fondo, envidia: por haber disfrutado y ejercido un presidencialismo sin contrapesos.

El teatro en atril mañanero, en realidad es un espejo más en el cual rebotan los epítetos que lanza todos los días y se convierten en su autorretrato. Para donde mire, él es su propio adversario.

He dicho.

EFECTO DOMINÓ

Al cierre de 2023, las reclamaciones por malos servicios del Banco del Bienestar alcanzaron los 384.6 millones de pesos, un disparo de 148% respecto del año previo, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV). Las principales quejas de los usuarios son por dinero no entregado y cargos no reconocidos en los cajeros de dicho banco.

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