TERESA GIL
La postura de Argentina frente al terrorífico Javier Milei que lo gobierna, a lo mejor se trata de negociar a partir de las creencias. Ese país tenía hasta hace poco el 76.5 por ciento de católicos, lo que equivalía más o menos a 34 millones. La presencia del gobernante en el Vaticano con abrazo y beso con el pontífice, no se parece a aquellas viejas frases incendiarias que Milei lanzó al papa de su misma nacionalidad, cuando lo llamo imbécil y “El representante del maligno en la tierra”. Todo eso ha salido a relucir ahora con la visita utilitaria del mandatario, para presenciar uno de esos ritos con los que esa iglesia católica mantiene firmes a muchos de sus miembros: la santificación de una mujer que en vida fue humanitaria y ayudó a personas necesitadas y que pese a ser laica, mereció de esa iglesia el reconocimiento. Su nombre es María Antonia de San José de Paz y Figueroa, llamada mamá Antula.
JUEGO DE CREENCIAS E INTERESES ENTRE CURAS Y GOBIERNOS
Mientras Milei buscaba apoyo en el Vaticano sorprendió mucho la actitud del papa Francisco porque suele ser más recatado. Las agencias que han enviado información sobre el acto religioso y la entrevista del lunes a Milei hablan maravillas del encuentro, pero el papa ha tenido cierta prudencia en sus actitudes y no se piensa que pueda ponerse del lado de un tipo que tiene dividida a Argentina. Mientras Milei se paseaba por ese pequeño país y daba sus vueltas a Roma, miles, por no decir millones, abarrotaban en su país los centros de comida gratuita para saciar su hambre. Ese es el extremo al que se ha llegado.
El YUGO DE LAS CREENCIAS ES UTILIZADO POR LOS GOBIERNOS
La fuerza del Vaticano subyace en las creencias. Y en México lo hemos visto expresado en forma descarada de sus gobernantes cuando precisan de una respuesta del pueblo. La invitación papal es el súmmum de la obtención política de un gobernante, pese a los enormes gastos que se invierten. Con las viejas leyes del pasado, que fueron desapareciendo desde que Portes Gil cedió ante los cristeros, los bienes eclesiales empezaron a salir por todos lados. Y esto ha llevado en México a una iglesia poderosa que tiene de todo, universidades, hospitales, clínicas, escuelas, etcétera. En el caso de Argentina, también ha competido con los evangélicos que en el país de Sudamérica son más de once por ciento incluyendo evangélicos y testigos de Jehová, más los no creyentes que suben a más de once por ciento. Siendo la gran mayoría católicos, el tal Milei no anda errado al buscar al papa mientras siguen adelante los cambios que pueden sumir a ese país, en algo que ya se presagia.
ANTE EL PODER QUE SE BUSCA EN LOS PAPAS, LA SITUACIÓN ES CONTROVERTIDA
En el libro Los papas y la iglesia del siglo XX (De Bolsillo 2005) los religiosos y autores españoles, Fernando García de Cortázar y José María Lorenzo, plantean la contradicción que vive esa figura a la que se acude en busca de apoyo: “La iglesia católica supuestamente debe proporcionar armas teológicas y filosóficas en abundancia, para convertir cualquier creencia en faro y no en caverna, en luminaria y no en sombra. Pero por otra parte el ritmo acelerado con lo que la ciencia y el pensamiento contemporáneos han avanzado desde mediado del siglo XIX, ha dejado una y otra vez, las posiciones siempre anticuadas de los vicarios de Pedro”.