TERESA GIL
La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), está abusando. Y no son pocas las personas con las que he contactado, que le están retirando su apoyo. Las luchas son fundamentales y deben ser respetadas, pero cuando se usa la violencia no lo podemos permitir. Algo que ha caracterizado a este sexenio es la apertura a la denuncia. El número desusado de manifestantes para exigir algo, ya es innumerable. Se repite en todos los contextos del país y gracias a ello, hemos conocido todos los problemas que se incubaron en una ciudadanía que antes no podía quejarse. Muchas de las demandas han sido cumplidas, otras están en trámite y algunas quizá quedan en suspenso por algún obstáculo. Lo que acaba de pasar en Guerrero en donde el presidente AMLO no pudo inaugurar la apertura del Centro de Rehabilitación Infantil Teletón, por la obstrucción que hicieron los de la CNTE estatal, demuestra uno más de los muchos casos que ese organismo, una de las secciones del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), realiza durante el año ¿A qué horas dan clases?
SE HAN COMETIDO DELITOS GRAVES QUE AMERITAN CÁRCEL
Como periodista confieso que durante muchos años di a conocer los problemas de los maestros disidentes. Como titular de la fuente educativa en el diario El Economista, recuerdo como estuve presente en aquel cambio de dirigencia del sindicato nacional, para imponer a Elba Esther Gordillo y las diferencias que se expresaron de parte de la disidencia en contra de la cercanía que esa maestra mostró por los que la habían nombrado realmente, el gobierno príísta. Escribí muchas notas y renuncié al diario porque la señora Gordillo tenía una presencia que no coincidía con lo que yo veía a diario en la huelga que estallaron los maestros de la CNTE. Y ahí siguió mi posición en el pasado sexenio, a partir de lo que muchos veíamos, una reforma educativa que tendía a la privatización de la enseñanza. Pero lo ocurrido en Chiapas en este sexenio cuando López Obrador fue secuestrado y prácticamente rodeado por una gran multitud de maestros, me conmocionó. Lo que hicieron esos maestros fue retener contra su voluntad a una persona. Es un tipo penal que se llama retención ilegal de la libertad o quizá secuestro. Algunos de los más cercanos instigadores pudieron ser procesados con pruebas públicas a la mano sin tener derecho a fianza. Pero el gobierno no quiso hacerlo. Sin embargo eso dejó al descubierto que independientemente de los problemas que tiene el magisterio y que deben de ser abordados, no se pueden aceptar acciones de esa naturaleza, más porque las cosas se pudieron derivar en algo grave, si se cuela un provocador armado. Y eso da otra pauta en el trato informativo sobre algunos maestros en los que no son todos por fortuna, (hay incluso un alto porcentaje de Morena dentro de la CNTE), sino un sector radical, “extremistas y provocadores”, como los llamó AMLO a los de Guerrero.
CUANDO LAS DENUNCIAS REBASAN LO PACÍFICO, DEBE ACTUARSE
La violencia en marchas y reuniones o expresadas en sectores, no van de acuerdo con la apertura que se ha dado en estos años. En el momento en que se ejerce violencia, se debe de intervenir. Es lo que se debió de haber hecho en las manifestaciones del 8 de marzo que dejaron a tantas policías heridas, algunas de gravedad y edificios y monumentos con destrucción. Parar la violencia no entra en el ámbito de la represión como han querido establecer algunas manifestantes. En sus documentos, la ONU señala los protocolos que se deben de aplicar en casos de violencia. Ha habido expresiones de violencia verbal en quienes buscan a desaparecidos, algunos de hasta de 40 años atrás y de parte de los abogados de los 43 que se han lanzado injustamente contra este gobierno cuando el que cometió el crimen fue el anterior. Otro caso, el de los migrantes, también debe de ser señalado. Primero, porque están en un país ajeno que deben de respetar y segundo, porque las leyes internacionales y nacionales, plantean límites de apoyo que los países de paso deben de aplicar. La ONU a través de Derechos Humanos no solo previene con observadores en marchas conflictivas, sino que ha extendido a todos los países, lo que es el documento Directrices para la Observación de Manifestaciones y Protestas Sociales, para que los gobiernos tomen los criterios que deben de usarse. Documento legítimo que AMLO puede usar cuando la CNTE vuelva a entorpecer la seguridad de su presencia.