Muchos de los rucos recordamos la canción ‘Los luchadores’ de la Sonora Santanera, un clásico en las funciones de lucha libre en México y, hasta en bodas de barrio, que diccce asssí: ¡pícale los ojos, jálale los pelos, sácalo del riiing!
Para quienes están en la bailada de la política no es muy diferente.
ROGELIO FAZ. Pues ya inició la función con una de las frases de esa melodía lanzada al ring de la política por el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, el Blue Damon de la política mexicana.
El canciller dijo hace unas semanas “en lugar de picarnos los ojos…”, en referencia a que algunos senadores de los Estados Unidos sugirieran calificar al crimen organizado mexicano de terroristas, convirtiéndose esto en una lucha electoral con doble cartelera.
El que encabeza la cartelera mexicana es el Cavernario, el presidente Andrés López Obrador, que se trepo a las cuerdas para hacer la voladora afuera del ring al acusar a Estados Unidos de “intervencionismo”.
Volaran sillas y pelos
En ambos países se acercan elecciones para elegir presidente y los coliseos se están llenando ‘de bote en bote’. Pues entonces ¡a menear el bote se ha dicho, hasta que llueva sudor! Por lo que se ve, la lucha por el poder político será un enfrentamiento de máscara contra cabellera, de rudos contra técnicos y, muy probable acabe en un todos contra todos.
‘La gente loca de la emoción’ dice otra frase de la canción. Y como no, los rudos están calentando el ambiente desde sus respectivos rincones.
Los sillazos no se limitan a sus respectivas divisiones de la WWE y la AAA, ya se están lanzando de cuadrilátero a cuadrilítero para ganarse el apoyo de sus fans. Del lado mexicano gritan ‘métele la wilson, métele la nelson, la quebradora y el tirabuzón’. Volaran sillas y pelos.
Fuera máscaras
Independiente de sus respectivos coliseos saben que para medir fuerzas hay que calarse en el barrio. Por un lado, está el espectáculo de la palabrería y cachetadas aparatosas que hacen más ruido que daño. Un ‘fake’ show para entretener a los más incrédulos.
Mientras que, en la arena de las pepitas, con más acrobacias riesgosas, también ya están recurriendo a la táctica de la fanfarronería.
Técnicos vs Rudos
Otra frase de la canción dice: ‘En el ring estaban los cuatro rudos de la afición, El santo, El cavernario, Blue Demon y el Bulldog’. Técnicos contra rudos. Dos estilos diferentes, desde llaves teatrales hasta el piquete de ojos con chile.
Cada país tiene a sus rudos en política como el Cavernario en el pancracio nacional, o un Blue Damon que se la quiere llevar de piquete de panza con sus pares gringos, como Ebrard. Al cavernario gringo (Trump) por ahora lo tienen en la lona a la cuenta de tres.
Fuera mascaras
En política aplica un refrán que dice: ‘se baila con quien te lleva al baile’, por eso los que están en la cartelera que encabeza AMLO, están rompiendo las reglas establecidas y atacan hasta a los suyos como el Bulldog (Adán Augusto) a Blue Demon, una especie de ‘pleito casado’ pero que van juntos al baile.
Una de las mañas del Cavernario mexicano seria hacerse pasar por El Santo para que no le quiten la máscara y no descubran su verdadero rostro, y espera que otros rudos salgan al rescate como el Bulldog. Porque, tal parece la Dama Enmascarada (Claudia Sheinbaum) no esta lista para los costalazos y perdería afición.
Del lado gringo están en espera que el ídolo rudo se zafe de la llave de puerquito.
Así que, ¡respetaaable publico luchaaraaan a 2 de 3 caídas…!