>> La “anécdota” de 12 mil, que pudo más que un millón
>> Monreal, ni madres que renuncie; que lo corran
Desde el cielo
una hermosa mañana…
desde el cielo
una hermosa mañana…
Saan Amlito… saan Amlito… saan Amlito
bajo al zoocalo…
MARTHA ELBA TORRES MARTÍNEZ (SemMéxico, Morelia, Michoacán). Ni irreverencia ni blasfemia a mi credo; una evocación espontánea de uno de los cánticos guadalupanos más populares y que sencillamente despertó al ver ese desborde de pasión en Reforma y el devoto AMLOísmo de Epigmenio Ibarra, a punto del desfallecimiento con tal de seguir en la procesión de la “reliquia viviente” rumbo al Zócalo.
“Yo tuve un tropiezo -que infames como tú magnifican- pero me levante, volví a echarme la cámara al hombro y llegue al Zócalo”, expresó el documentalista de López Obrador, al tuit de Joaquín López Dóriga:
“Entre los miles de simpatizantes del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) que acudieron desde temprana hora al Ángel de la Independencia para participar en la llamada “Marcha del Pueblo” se encontraba el productor Epigmenio Ibarra, quien se puso mal y sufrió una descompensación durante la movilización”.
A medio domingo 27, circuló en redes sociales el video en el que se ve a productor de Argos doblado sobre una camioneta color naranja y una mujer echándole aire para que recuperara el aliento; se veía pálido y desencajado. Ya uno no está para esos trotes.
Pero es la querencia. La que sin duda movió a miles que se abalanzaban sobre la “reliquia” para tocarla, tomarle la foto, aunque también en momentos parecía a punto del desvanecimiento. En la transmisión en vivo de Milenio, se refirieron varios momentos críticos.
“Esto sí es historia, la otra fue una anécdota”, escribió Ibarra en Twitter en su comparación sobre las marchas del 27 y la del 13N…
***
Pues lo que son las cosas. Y más pronto cae un hablador que un cojo.
Esa “anécdota” de apenas 12 mil personas, según la cuantificación de Martí Batres, secretario de Gobierno de la CDMX, sobre la marcha del domingo 13 de noviembre del Ángel de la Independencia al monumento a la Revolución, pudo más que el millón 200 mil de fieles del “santo patrono” de la 4T que no pudo con el milagrito de chingarse al INE.
La “anécdota” gritó a todo pulmón: ¡el INE no se toca! Y el bloque opositor en San Lázaro respondió. Bueno, prodigio si hubo, pero del otro lado, porque Morena termina solito y su alma con la iniciativa del Presidente. El Partido Verde y el del Trabajo ya nada más andan como que la Virgen les habla.
Sí, la procesión de “San Amlito” quedará en la historia, pero en la más negra, sangrienta y vergonzante del México moderno, mientras que la “anécdota” comenzó a reescribir la historia de la cada vez más apreciada democracia en nuestro país…
***
Entonces, es claro que la marcha de apenas 12 mil, pudo más que la del millón 200 mil para frenarle al presidente López Obrador su intentona de control absoluto de las elecciones.
Porque es cosa nada más de informarse y no hablar a lo pendejo, como le escuché a una diputada local morenista:
AMLO quiere eliminar el voto directo de los legisladores y autoridades, para ser electos indirectamente, esto es, a través de listas; se asignarían, por ejemplo, diputados y senadores, de acuerdo al resultado global que haya obtenido cada partido y en relación al número de habitantes en cada estado.
¿Podemos comparar Tlaxcala (1.3 millones de habitantes) o Baja California Sur (800 mil) con la Ciudad de México (9.2 millones) o Edomex (16.9 millones)? ¿A qué entidades corresponderían más diputaciones? Y ahora, esto hay que trasladarlo a las entidades federativas para sus procesos locales.
Es una soberana mentira que las y los consejeros y magistrados electorales serán “elegidos por el pueblo”. Las propuestas saldrán del presidente AMLO, de las cámaras de diputados y senadores que controla AMLO a través de Morena y de la Suprema Corte, que también está al servicio de AMLO. A ver qué imbécil se traga este cuento.
Suena a toda madre que le quiten dinero al INE y financiamiento público a los partidos. ¡Va! Pero se abren las elecciones al financiamiento privado. Esto es que cualquier persona, organización y cártel del crimen organizado nacional o extranjero podrá fondear sin fiscalización, campañas para apoderarse de los cargos públicos.
Y que Morena haya pospuesto hasta el próximo martes 6 de diciembre la votación del dictamen de la reforma del Presidente, tiene qué ver, por un lado, que sus aliados no están tan dispuestos a darse el balazo en la sien con la eliminación de las curules para las minorías políticas, y por el otro, volver a doblar a Alito Moreno, con la amenaza del desafuero.
El coordinador de Morena, Ignacio Mier, ya dijo que tienen hasta el 15 de este mes, que termina el periodo ordinario de sesiones, para sacar la reforma de AMLO. Pero también antes de esa fecha, podría estar listo el dictamen del juicio de desafuero contra el diputado priísta Alejandro Moreno, y que se había “congelado” como resultado del apoyo del PRI a la reforma constitucional en materia de seguridad.
Aquí el tema, es que el que está en presuntos problemas legales, por corrupto y ambicioso, es Alito y no todas y todos los integrantes de la bancada. Así que el susodicho que entregue vilmente su voto a Morena y no comprometa el de los demás. La otra: que se “licencie” y asuma las consecuencias de sus fregaderas.
Porque no es posible, que la “anécdota” del 13N que le paró los tacos al mismísimo dictador de cuarta, termine como una triste historieta por culpa de este personaje tan despreciable hasta para los propios priístas. Yo no sé cómo todavía lo tienen de presidente del tricolor…
***
El que no debe renunciar a Morena, es el senador Ricardo Monreal.
Ya le pidieron que se alinee -nunca de frente-, Mario Delgado con eso de que “hay un gran repudio, rechazo y enojo en la militancia” y el propio López Obrador desde la mañanera: quien no este con la “corcholata” que él decida, pues “que te vaya bien”.
Pero ni mais. Que aguante hasta que le hagan consejo de guerra y lo expulsen, que le arranquen del pecho las medallas a todos sus logros; que el propio Presidente desde su púlpito, lo crucifique, por tener pensamiento propio, independencia emocional, probidad y amor a México.
No se cómo alguien pueda pensar que una sumisa, sin iniciativa y pusilánime, pueda gobernar este país. Si no pudo con el paquete su guía moral, menos una personaja de tan bajo calibre. Pero veámoslo así: que sea la candidata de Morena no quiere decir que sea la señora presidenta…