Ciudad de México, 15 de septiembre (entresemana.mx). En el marco del Día Internacional de la Democracia, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hace un llamado a los Estados de la región a proteger y fortalecer la institucionalidad y el Estado de derecho.
Igualmente se ha observado en algunos países, la afectación a la independencia de los poderes del Estado para la permanencia de un determinado grupo político.
Ambas situaciones repercuten directamente en el sistema de pesos y contrapesos toda vez que minan la confianza ciudadana en las instituciones, en los procesos electorales, y en el Estado de derecho.
Adicionalmente -indica la CIDH-, contribuyen al aumento de la conflictividad y polarización social, potencializando riesgos para el sistema democrático y, por consiguiente, para los derechos humanos.
Recordó que los Estados asumieron el compromiso de consolidar la democracia al adoptar la Carta de la OEA y Carta Democrática Interamericana. No obstante, resaltó que en los últimos años, se han registrado algunos procesos de desacreditación de las instituciones democráticas por parte de sectores inconformes con los resultados en las urnas.
De igual manera los Estados se comprometieron a consolidar la democracia y reconocieron que esta es necesaria para alcanzar la estabilidad, la paz y el desarrollo de la región. Y los elementos democráticos son, entre otros, el respeto a los derechos humanos, el acceso al poder y su ejercicio con sujeción al Estado de derecho, la celebración de elecciones periódicas, libres y justas, y la separación e independencia de los poderes públicos.
Si bien varios países del hemisferio han celebrado elecciones periódicas ininterrumpidas en las últimas décadas y fortalecido su institucionalidad democrática, en los últimos años, se han registrado algunos procesos de desacreditación de las instituciones democráticas por parte de sectores inconformes con los resultados en las urnas.
Con el ánimo de preservar la democracia y prevenir violaciones de derechos humanos, es fundamental que se respeten los procesos democráticos periódicos, libres, justos y basados en el sufragio universal y secreto como expresión de la soberanía del pueblo.
Asimismo, es indispensable que las autoridades —así como las personas que buscan ocupar cargos de elección popular— se abstengan de realizar ataques a las instituciones estatales.
La CIDH recuerda que la democracia inspira, irradia y guía la aplicación de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y demás instrumentos del Sistema Interamericano. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan sus países de origen o residencia.