* A menos de 24 horas de su toma de posesión, el nuevo mandatario hidalguense convocó a su primera conferencia de prensa donde dio respuesta a todo tipo de preguntas. Y destacó que si hay anomalías, “vamos a llamar a los responsables de los órganos internos de control”. Añadió que se va a pagar un despacho privado “para tener una radiografía completa de todas las cuentas… no vamos a ser cómplices de nadie, es lo sano de una auditoría, no de persecución, pero sí de claridad»
ANTONIO ORTIGOZA VÁZQUEZ (@ortigoza2010/ Especial de Expediente Ultra). El gobernador Julio Menchaca Salazar, con pícara sonrisa, contestó a una reportera: «¿Mañanera? No pretendo competirle al Presidente… hay niveles».
A menos de 24 horas de su toma de posesión, el nuevo mandatario hidalguense convocó a su primera conferencia de prensa, donde contestó todo tipo de preguntas, dio un bosquejo de lo que será un plan de gobierno y en cuanto al polémico personaje que será —mediante ajustes legales y constitucionales— el Fiscal General del Estado, Santiago Nieto, aclaró que «con un actor político de ese tamaño, siempre tendrá detractores».
En cuanto al escándalo del Banco Accendo, el gobernador hizo notar que «no solo perdimos los 807 millones que la Secretaría de Finanzas depositó, sino que también hay un faltante de 57 millones en la Secretaría de Salud».
Sacó a colación una charla con el ex Secretario de Hacienda y ahora alto funcionario internacional, Arturo Herrera, quien le dijo: «¿A ti se te ocurriría un depósito en un banco que no tiene una sucursal para que vayas a ver cuál es tu saldo? Es algo que se tiene qué explicar».
Menchaca aclaró que «el fondo que protege esto cubre a todos los cuentahabientes hasta dos millones 700 mil pesos» y añadió que el Presidente López Obrador dio instrucciones para que la Secretaría de Hacienda ayude en la recuperación, aunque admitió que «lo veo verdaderamente difícil, complicado» y que todo eso fue «una inverosímil inversión».
En cuanto a las condiciones en que recibió las finanzas estatales, aclaró que «no tengo visión en blanco y negro, pero sí hay desorden administrativo, una situación que es menester romper».
Anunció, además, la creación del «Instituto para Devolver lo Robado al Pueblo de Hidalgo», con el modelo de la institución federal y realizar la restitución a la sociedad de los daños que ocasiona la corrupción.
En cuanto al asunto de viáticos y gastos, lo que en forma recurrente genera censuras de la sociedad, dijo: «A mi toma de posesión llegaron varios gobernadores, tres secretarios de Estado y otros invitados importantes, y me sentí en la necesidad de corresponder a su atención, los invité a una comida, que pagué de mi bolsa. No invité a las aproximadamente siete mil personas que llegaron a la ceremonia, porque no me alcanza».
La conferencia de prensa transcurrió con fluidez, con reporteras y reporteros que plantearon muchos de los asuntos pendientes en la entidad, y para todos tuvo respuestas puntuales. Al inicio, el moderador aclaró que «habrá solo 20 preguntas», pero Menchaca hizo un gesto como diciendo «las que sean, hombre».
De entrada, se hizo notar un detalle que los periodistas señalaron como una grata novedad: la puntualidad del gobernador, quien aprovechó para precisar: «Respeto mucho el tiempo de los demás».
Comentó que de pronto le asaltó una duda: «¿A quién concedería la primera entrevista? pero decidí que, para no herir susceptibilidades (algo muy común en el medio, debe reconocerse, tenemos la piel muy delgada) habría una conferencia colectiva, para dar su lugar a cada uno y con piso parejo en el trato».
En cuanto a la posible restructuración del cuerpo de colaboradores en los diferentes niveles, aclaró que «vamos a respetar a trabajadores distinguidos por su integridad, nada de ‘tabula rasa’, habrá respeto para las trayectorias profesionales, pero hay ciclos que se cierran y los nuevos funcionarios deberá acreditar sus méritos».
Mencionó que hizo proposiciones a diferentes personajes de la entidad, muchos de ellos, de actividades empresariales, los que se pusieron a hacer cuentas por lo magro del presupuesto para sueldos, pero no fueron pocos los que aceptaron colaborar. Habrá muchos ‘primerizos’ en asuntos de función pública, y seremos todos evaluados -yo incluido- y deberá ser muy pronto».
Reveló que «la gran prueba» será el último trimestre del año, porque deberán de operar con lo que quede del presupuesto, pero será de gran experiencia para la elaboración del programa para 2023. «Sería temerario -advirtió- anticipar avances si no se tienen los recursos».
Sin asumir poses de moralista, Menchaca hizo notar que una mala costumbre de los políticos en Hidalgo es la ostentación. «Aquí nos gustan las camionetas de lujo, se dan verdaderas competiciones para ver quién de los funcionarios vive con más lujo, en agravio insolente a la población».
Al insistir en el tema, recalcó: «Peor todavía: hay quienes se esfuerzan en presumirlo, y eso es fantochería, presunción…»
Dejó en claro que si hay anomalías, vamos a llamar a los responsables de los órganos internos de control, «porque sucede que cuando se rinden los informes se afirma que todo está bien, y que de más de 50 revisiones, solo se encontraron cinco casos de irregularidades. Se va a pagar a un despacho privado para una radiografía completa de todas las cuentas… no vamos a ser cómplices de nadie, es lo sano de una auditoría, no de persecución, pero sí de claridad».
Al abundar en el asunto de la corrupción de funcionarios, hizo notar que «lo malo de eso no es que sólo lo sea, sino que además permite que otros hagan lo mismo… un presidente municipal puede ser flexible en detalles, y entonces es cuando surgen fortunas inexplicables».
A una pregunta acerca de la controvertida personalidad del ex Fiscal para Delitos Financieros, Santiago Nieto, Menchaca fue directo: «Conozco a Santiago desde hace varios años, es doctor en derecho de gran reconocimiento internacional». Aclaró que como no es del estado, se llegó a un acuerdo con el ex gobernador Omar Fayad para cubrir una especie de interinato como «encargado del despacho» en tanto se reforma la ley del ramo para convertir la Procuraduría en Fiscalía.
Precisó que no es solo un cambio de título para el cargo, sino que «implica cambiar todo un esquema de procuración de justicia, donde la persona agraviada en sus derechos, deberá obtener justicia. Tenemos pendientes 50 mil averiguaciones previas, pero en rigor son personas agraviadas, que se quedaron sin justicia».
Y en defensa del inminente fiscal hidalguense, el gobernador remarcó: «Con un actor político de ese tamaño siempre tendrá detractores».
Un asunto muy sensible fue tocado por una reportera: El destino que se dará a la Casa de Gobierno, cuyo mantenimiento implica un costo de 700 mil pesos mensuales, y el mandatario aclaró: «Seguiré viviendo en mi casa, donde tengo ya 30 años, y eso sí, procuraré dar a mis vecinos las menores molestias posibles. Las instalaciones se destinarán a un grupo eminentemente social».
En cuanto a la «Casa Blanca» de Huejutla, «ya hay un estudio muy adelantado para convertirla en museo. Esa Casa la utilizaba el gobernador Fayad, cuando en realidad hay muy buenos hoteles en Huejutla».
En suma, fue una conferencia de prensa ordenada, ningún reportero tuvo motivo de queja, preguntaron todo lo que tenían en cartera, inclusive temas ya tratados exhaustivamente en la campaña y posterior a las elecciones.
Menchaca tuvo trato cortés, inclusive afable, ya que presumió conocer de años a la mayoría de los periodistas presentes.
El gobernador, justo es señalarlo, demostró conocimiento de todos los temas, todos los asuntos, desde los dolorosos, como la inundación de Tula y los enfermos de Covid, muertos por las inundaciones hasta la reportera que le preguntó si acaso «¿Hará usted una mañanera, una vespertina?» y Menchaca, muy divertido, le replicó: «No voy a competir con el presidente».