CARLOS RAMOS PADILLA*. Se cumplen seis meses desde el momento en que el ejército ruso atacó unilateralmente a Ucrania, desafiando al mundo entero. No se trató de una amenaza y de una simple invasión, escaló el conflicto y es una guerra inútil, costosísima y innecesaria. Europa y Estados Unidos fueron sorprendidas y hay quien califica a Biden como un líder timorato y débil dejando a la cautela en segunda exposición. Hasta este momento y hay que suscribirlo, las sanciones políticas y económicas no han debilitado ni doblado a Putin. Las lecturas en geopolítica interpretan el control de la zona por Rusia a razón del gas y los granos además de no permitir ejercicios de independencia y democracia en lo que antes eran los dominios de la Unión Soviética. También dejo en evidencia que Putin no está solo, cuenta, por el momento, con China como gran aliado.
La solidaridad mundial no ha sido suficiente y la extraña conducta de países como Venezuela, Nicaragua y Mexico que coquetean con un comunismo desaparecido pero con un izquierda tirana. Los brotes de inflación global y la merma en servicios turísticos han provocado que países como Estados Unidos desequilibren su economía impactando a las inversiones y comercio. Pese a todo, la guerra aún no rebasa las fronteras ucranianas y ninguna nación se ha visto obligada a intervenir con armas. Hoy se habla de más de 6.6 millones de refugiados en un flujo migratorio impresionante. Los pronósticos de muchos al anticipar el inicio de una tercera guerra mundial se han quedado ya, injustamente, en noticia de relleno e incluso ante la tragedia de los ucranianos en días de olvido periodístico. Vamos ni en la ONU se conmueven menos el Vaticano. Las protestas han disminuido gradualmente y mejor la atención se centra en Qatar y su mundial de fútbol. Años estos últimos de muchas muertes por hambruna, terrorismo y violencia, guerra y pandemia. La apatía permite que la guerra se extienda para beneficiar a los que ganan con ese negocio fortaleciendo su industria mortal. De acuerdo al Pentagono entre 70 y 80 mil soldados rusos han muerto en Ucrania convirtiendo en una carnicería el escritorio donde decide Putin.
*Conductor del programa VaEnSerio mexiquensetv canal 34.2 izzi 135 y mexiquense radio
@cramospadilla