TERESA GIL. A nadie lo envolverán las sombras cuando AMLO se haya ido. Primero porque los opositores están muy contentos con su declaración de que dejará el espacio público en su totalidad. Y en cuanto a su gente, sus amigos, y sobre todo el gran pueblo que lo ha apoyado, tiene asideros para seguir adelante. La frase de que nadie es indispensable no es del todo correcta. La gente que se ausenta o que se va para siempre, deja un vacío que tarda en llenarse y una vez superada la ausencia, queda el recuerdo. Eso sucede a nivel público con los grandes líderes, con los que se han significado a través de sus obras, sus propuestas, sus proyectos, Y no solo en la política, en todo tipo de obras que quedaron ahí y siguen siendo parte de nosotros. Muy sabio fue Carlos Marx cuando al plantear un cambio fundamental en la vida de la humanidad, respetó los grandes aportes que esa humanidad ha hecho. La vida no empieza con nosotros, hay siglos que nos preceden y el humano dejó huellas. La ausencia física es rebasada con los aportes que dejaron o en el caso de los grandes teóricos, poetas, escritores, pintores y todo lo que crea, precisamente con sus creaciones. Y en la política, aunque a veces se empantane y nos topemos con las peores miserias, hay personas que si crean.
AMLO NO SE VA DEL TODO, LOS LIBROS SON LA MEJOR PRESENCIA
Las palabras del actual presidente tan abundantes en toda su vida, aumentadas en la Mañanera, tampoco se irán. Hay miles de grabaciones, videos, reproducciones de todo tipo, de escritos, de impresiones diversas. No hemos podido eliminar de nuestras vidas lo que se expresa en nombres y placas de represores, menos lo podremos hacer con personajes que han dado parte de su vida a cambiar las nuestras para bien. Y en la historia que queda grabada en palabras, están los mensajes, los puntos de vista que se graban en las mentes. La lucha de un personaje como AMLO, que no es perfecto y ha cometido errores como cualquier ser humano, se yergue de muchas maneras. Es a veces revolucionaria, otras lo es convencional. Hay en el fondo de su vida agitada un personaje quizá tímido, ligeramente conservador en cuestiones de creencias, pero tiene principios. Esos son los que aparecen en sus propuestas y se expresan por escrito en sus libros. A la fecha lleva 19 libros y no se sabe cuantos más escribirá cuando tenga todo el tiempo del mundo para hacerlo. Si en la vorágine de su vida de permanente movimiento ha escrito esos, ya nos imaginamos tomos completos que a lo mejor dirimen desde otra perspectiva nuestra propia historia.
PARTE DE LA HISTORIA DE MÉXICO, EN LA VIDA DE UN PERSONAJE
Para los medios que han hecho seguimiento de la escritura de AMLO, se cuentan 19 los libros desde 1986 cuando escribió Los Primeros pasos. Tabasco. Después en los años ochenta y noventa del siglo anterior, los libros se fueron desgranando siempre a partir de problemas del país, de personajes y de lo que ha sido constante en su lucha, los fraudes, como lo destacó en 1990. Ya en el nuevo milenio volvió a tocar el tema en 2007, con su obra La mafia nos robó la presidencia. Fue su denuncia contra el descarado fraude que hizo Felipe Calderón apoyado por Vicente Fox. Los títulos siguientes van marcando los temas mas urgentes y el momento político que se vive: Neoporfirismo, Entre la historia y la esperanza, Hacia una economía nacional, Oye,Trump, etcétera, hasta llegar a su último libro A la mitad de camino (Planeta, marzo 2022) en el que aborda sus tres primeros años de gobierno. En sus libros no divaga, va al tema directamente y en algunos la profusión de datos asombra.¿Como le hace para escribir libros mientras gobierna? Algo se responde cuando se le ve escribiendo incluso en los aviones. La escritura, como suele suceder con muchos que escriben, no es solo instrumento de análisis o denuncia, también lo es para obtener ingresos en el esfuerzo de vender libros. De este último libro que considera el mejor vendido habían salido miles en poco tiempo y recibía el 12 por ciento de cada libro vendido. Si se juntan los aportes que AMLO lleva hasta ahora en las páginas impresas, se puede recuperar sin egoísmos y pequeñez, la visión de una parte de la historia con datos precisos, que certificarán su presencia en la vida nacional aunque se haya retirado.