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>> Se dan con todo en el Congreso de Tamaulipas
>> Diputados azules pretenden dejar un “campo minado”
>> La misión: blindar al gobernador García Cabeza de Vaca
MARIO DÍAZ (El Diario de Matamoros). MUY, pero muy lamentable, la situación que priva en el Congreso del estado de Tamaulipas como consecuencia de la confrontación de ideas entre los diputados que integran las fracciones de Morena y el PAN, con sus respectivos aliados.
La falta de un liderazgo real y autónomo en la Junta de Coordinación Política ha enrarecido el ambiente legislativo, lo que a su vez ha generado un clima de violencia verbal y ausencia de argumentos entre los integrantes de la LXV Legislatura Tamaulipeca.
Mientras los diputados panistas acusan a sus homólogos morenistas de entorpecer la agenda legislativa al interrumpir los trabajos programados; los representantes populares de Morena afirman que tomaron esa decisión para impedir acuerdos encaminados a blindar al gobernador FRANCISCO JAVIER GARCÍA CABEZA DE VACA.
Cabe señalar que la actual composición de las fuerzas política en el Congreso Local le concede la ventaja mayoritaria a la fracción panista y aliados al sumar 20 diputados, contra 16 que reúnen Morena y Movimiento Ciudadano.
Por tratarse de modificaciones administrativas y no reformas constitucionales, la mayoría simple es suficiente para aprobar ese tipo de iniciativas, lo cual, por ende, le da la ventaja a la fracción legislativa panista.
Al margen de a quien le asista la razón, lo cierto es que el PAN-gobierno con el apoyo del Poder Legislativo pretende dejar un “campo minado” a los próximos integrantes del Poder Ejecutivo que habrán de asumir esa responsabilidad a partir del primero de octubre.
Mantener la presidencia de la Junta de Coordinación Política, aprobar por la vía fast track las cuentas públicas del gobernador y de los alcaldes panistas, aprobar la seguridad privada para el mandatario, su familia y los miembros del gabinete, “sembrar” por seis años más al Fiscal General del Estado e impedir la transparencia en la rendición de cuentas del gasto público es la misión de los diputados del bloque PAN-PRI-PRD, en atención a las instrucciones giradas desde la oficina más importante del tercer piso del Palacio de Gobierno.
El zipizape inició a temprana hora del lunes, cuando los diputados morenistas se dieron cuenta de la maniobra y abandonaron el recinto para impedir la instalación de la sesión por falta de quórum; sin embargo, al notar que de última hora lograron la mitad más uno (19 diputados) optaron por tomar la tribuna y “reventar” el trabajo legislativo. La invasión del público que se encontraba en los palcos al salón de pleno motivó que se solicitara la intervención de la fuerza policial.
Ayer martes, agentes de la Policía Estatal prácticamente sitiaron el recinto legislativo e impidieron el acceso a los ciudadanos y reporteros a pesar de que el artículo 77 de la Ley Orgánica establece que las sesiones son públicas.
Ante tal situación, los diputados de Morena ingresaron a las instalaciones del Congreso Local y colocaron candados y una manta con la leyenda de “clausurado”, impidiendo el ingreso a los legisladores que encabeza la fracción panista.
Vale la pena mencionar que desde la instalación de la LXV Legislatura tamaulipeca la lucha por el control de ese Poder constitucional se ha manifestado de distintas maneras. Primero, por la estrategia desplegada por el PAN-gobierno para recuperar la mayoría simple en el parlamento y, posteriormente, para dejar acuerdos que blinden contra investigaciones y auditorías a los integrantes del poder Ejecutivo que terminan su responsabilidad el 30 de septiembre.
El combate entre ambas fuerzas antagónicas en el Congreso de Tamaulipas se centra en el hecho de que los diputados morenistas intentan impedir que los legisladores panistas dejen un “campo minado” en espera del arribo de la nueva alternancia partidista. En contraparte, los albiazules, atendiendo instrucciones del mandatario tamaulipeco, intentan a toda costa cumplir la misión que les encomendaron ante supuestos o reales acuerdos, olvidando que son representantes populares y no empleados al servicio del Ejecutivo.
DESDE EL BALCÓN:
I.-Interesante y productiva, sin duda, la entrevista exclusiva que concedió la senadora mexicana MARTHA LUCÍA MICHER CAMARENA a la cadena ANPLC-NETWORKS que dirige el periodista GILBERTO CORTEZ, presidente de la Asociación Nacional de Periodistas, Locutores y Comunicadores-USA.
La representante en la Cámara Alta del Congreso de la Unión, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, acudió en visita oficial al Consulado General de México en Dallas, Texas, bajo la responsabilidad del cónsul FRANCISCO DE LA TORRE GALINDO, en donde atendió a representantes de la Casa Guanajuato-Dallas.
Inseguridad en carreteras, problemas para obtener la Carta Constancia de Acreditación para establecer la identidad y obstáculos para realizar donaciones de vehículos de emergencia y equipo de servicios médicos, como ambulancias y tanques de oxígeno, fue la problemática escuchada por la senadora de la república y externada durante la entrevista periodística.
Asimismo, CORTEZ aprovechó la oportunidad para informar a la legisladora mexicana que la ANPLC, a partir de enero del año en curso, es una organización binacional que aglutina a periodistas y comunicadores de los Estados Unidos y México. Le precisó que quien abajo suscribe al calce preside la ANPLC-México.
Como nobleza obliga, la ANPLC-USA-México agradece la invitación, atención y facilidades para la entrevista del agregado de Prensa en el Consulado General de México en Dallas, Texas, RUBÉN E. OVANDO.
Y hasta la próxima.
