Ricardo Burgos Orozco
Ciudad de México, 16 de mayo (entresemana.mx). Hace unos días tenía una reunión en un edificio contiguo al centro comercial Santa Fe. Confieso que nunca había ido a esa zona en transporte público y no sabía exactamente cómo iba a llegar. Chequé en internet y vi que la manera más fácil era desde la estación Observatorio del Metro y de ahí tomar una pesera hacia allá.
Hace años que no llegaba a Observatorio. Hay mucha más gente y tránsito más problemático que cuando estuve la reciente ocasión; además, hay un tianguis permanente alrededor, paradero de peseras y la Terminal de Autobuses del Poniente, que inició operaciones en junio de 1979. Por fortuna a esa hora no había tanta gente en el Metro.
En el sitio de camiones foráneos se reúnen diariamente miles de personas para viajar a Toluca, Colima, Manzanillo y Puerto Vallarta. Alrededor hay decenas de ambulantes de todo tipo de mercancía; por supuesto, lo que más abunda son los puestos de antojitos mexicanos.
Al llegar a la estación Observatorio, salí e inmediatamente pregunté al vigilante donde podía salir a tomar un transporte a Santa Fe. Muy amable me indicó la ruta. El parador del pesero hacia mi destino estaba precisamente frente a la terminal de camiones, que ya se ve vieja y un tanto descuidada; no es para menos con 45 años de existencia. Dicen que en su momento la inauguró el entonces presidente José López Portillo y Pacheco, ya fallecido.
Pregunté a un despachador para no equivocarme. Me contestó que en ese momento no había peseras, pero no tardaba en llegar alguna. Me senté en una pequeña banca a esperar y mientras lo hacia recordaba la razón por la cual le llamaron Observatorio a esta estación del Metro de la Línea 1 que va de aquí hasta Pantitlán.
El símbolo de la terminal es un domo entreabierto con un telescopio. Cerca de la estación Tacubaya estuvo por muchos años el Observatorio Astronómico Nacional; primero lo instalaron en Palacio Nacional, luego en Chapultepec hasta que encontraron un sitio remoto casi sin gente — en el lejano 1908 — en Tacubaya.
El observatorio, integrado por cuatro domos, permaneció en el Palacio del Arzobispado hasta 1942 cuando fue llevado a Tonantzintla, Puebla. En 1963 el edificio fue demolido para construir la Escuela Nacional Preparatoria 4 y a un lado, el Servicio Meteorológico Nacional, pero en recuerdo la avenida cercana recibió el nombre de Observatorio.
Me sacó de mis recuerdos la voz del despachador que nos invitaba a subir a la pesera a mí y a otras cuatro o cinco personas formadas. Subí y me alejé de esa zona ahora congestionada.
Quién pensaría en aquellos años cuando estaba el observatorio, que por esa estación del Metro iban a circular mensualmente más de seis millones y medio de usuarios, otros miles más en la Terminal de Autobuses Poniente y en las calles repletas de autos y de vendedores ambulantes.