ELVIRA HERNÁNDEZ CARBALLIDO (SemMéxico, Pachuca, Hidalgo). Nacida en Pachuca, Hidalgo, poeta y periodista, su obra ha sido poco estudiada, sin embargo, en la exploración que he podido hacer sobre su trayectoria periodística, fue interesante descubrir el periódico que Margarita Michelena (21 de julio de 1917-27 de marzo de 1998) fundó al empezar la década de los ochenta. Un sencillo homenaje para evocarla.
Fue así como el 21 de enero de 1980, fue presentada a la sociedad mexicana esta publicación:
Amigos lectores; tienen ustedes en sus manos el número inicial del diario CUESTIÓN, un periódico que, por primera vez en el mundo; está realizado totalmente por mujeres. En ello radica su absoluta novedad y en ello su estilo diferente, valeroso, sencillo y claro, sin amarguras ni solemnidades y con una seriedad que no excluye la amable ligereza ni el bendito buen humor. Vaya por delante una indispensable precisión: en CUESTIÓN no somos activistas del feminismo, aunque de ninguna manera deje de interesarnos vivamente la promoción social, económica, política y cultural de la mujer. De hecho –y prescindiendo de todos los “ismos”- podemos decir que nada de lo humano nos es ajeno y que tratamos de ver esa suprema realidad de lo humano con nuestra propia visión: total y objetivamente, con valentía y trascendencia.
Al desligarse del feminismo, parecía permitirles garantizar un trabajo periodístico más comprometido con el oficio tal cual y con la promesa de informar y opinar con una perspectiva que les garantizaba el simple hecho de ser mujeres:
CUESTIÓN tiene una noble ambición: la de contribuir a renovar e innovar el periodismo nacional aportándole el recio sentido moral de la mujer que ha sabido concurrir a la lucha por el cambio de lo que debe cambiar, y al mismo tiempo, ha preservado aquellos valores sociales y humanos que escudan de la indignidad y se oponen a la corrupción que, por desgracia, se extiende a todas las esferas de la vida y la actividad y que empieza en las palabras para contaminar en seguida la conducta.
CUESTIÓN es pues un diario que sale a la luz con una fe muy sólida y justificada en la integridad moral, en la conciencia social y en la capacidad intelectual de las mujeres. Para dar prueba de esa realidad tan alentadora que queremos hacer aquí un periodismo noble, independiente y claridoso, que nos permita cumplir con el fin supremo de nuestra profesión: promover con la verdad de la información y su análisis, esa salud social que tan en peligro ponen el sentimiento de la opinión y la manipulación de la noticia.
Michelena aseguraba que su equipo estaba formado por un grupo de mujeres “altamente calificadas en lo profesional y lo moral por un periodismo sano, socialmente necesario y útil, que contribuya a la superación de la colectividad”. Es así como su equipo estaba formado y distribuido de la siguiente manera:
Directora General: Margarita Michelena
Jefa de Redacción: Marcela Grossgerge. Jefa de Información: Carmen Anderson
Asistente de Dirección: Luz María Díaz-Caneja
Secretarias de Redacción: Bella Mischne y María Antonieta Jaime Bougert
Secciones:
Financieras: Judyth de León
Culturales: Montserrat Galí
Espectáculos: María Teresa Flores
Deportes: Martha Irma Espinosa
Sociales: Aura Vidales Ibarra
Departamento de Cables: Amalia Piñó y Judith Campos
Centro de Información: Marina Baltodano
Entre las reporteras se encontraban: Verónica Valdés González, Ana Zamaconas, Andrea Becerril, Leona I. Rosas, Fátima Martínez, Esther Castellanos, Luz María Uribarri, Martha León, Ada Irma Cruz, Susana Vidales, Eva Velázquez, Juana Lorenza, Beatriz Bueno, Isabel Rodríguez y Lupita Cortés.
Ese lunes 21 de enero, el presidente José López Portillo apareció en la primera plana inaugurando el edificio de Cuestión, junto con la directora de RTC (Radio, Televisión y Cinematografía) Margarita López Portillo, que durante su discurso dijo:
La iniciativa de este diario se traduce en una nueva primacía de México, es de Margarita Michelena, poeta y escritora. Inteligente luminosa, gloria de las letras mexicanas. Margarita Michelena como directora del nuevo diario, es garantía de su espíritu de combate femenino y universal… Vivimos esta mañana un momento estelar en la historia del periodismo en México, nace un diario, tal vez el primero de esta característica en el mundo, realizado por mujeres. No quiere decir esto, que tenemos un diario feminista, la verdadera femineidad se ha manifestado siempre en ayuda y apoyo al hombre y es evidente que el nuevo periódico, lejos de obsoletas tendencias matriarcales, refleja un nobilísimo esfuerzo femenino. Presenta las noticias de México y el mundo con el más estricto apego a la verdad, pues sólo la verdad salva.
Estos comentarios tan insistentes en demarcar al periódico del feminismo seguramente están basados en la fuerza, pero al mismo tiempo en la incomprensión y rechazo que tenía el movimiento feminista en México. Posiblemente por ello, la revista FEM publicó un texto donde hace fuertes cuestionamientos al recién nacido periódico:
Después de leer atentamente el editorial –inferior a muchos fragmentos de buena prosa de Margarita Michelena- es lógico preguntarse para qué un periódico de mujeres. No tienen por qué escribir mejor las mujeres que los hombres, ni son, por definición, más valientes, libres, veraces e independientes (calificativos que atribuye Cuestión a la expresión de la mujer); ni constituyen una república aparte en el mundo de las letras, las artes o la ciencia. Lo que sabemos es que las mujeres padecen más que los hombres la injusticia de las leyes y las costumbres (sin excluir que otros sectores sufran injusticias), y por lo tanto tiene razón se der la lucha: esa lucha se llama feminismo y que no es simplemente la promoción de la mujer, como lo piden las revistas femeninas.
FEM cuestionaba severamente a la publicación porque sus noticias hacían vislumbrar “que vivimos en el mejor de los mundos” y que en su primer número no presentaran a ninguna mujer que haya destacado en el ámbito político o social. De igual manera, si bien no presentaban desnudos femeninos como todos los periódicos vespertinos, sí se preferían los espacios de la sección “femenina”, que iban de la moda al cuidado del hogar. Con bastante crudeza y de forma muy directa FEM expresó su crítica:
Aunque niegan ser feministas, las mujeres de Cuestión incursionan en el feminismo, pero para dar su versión más ramplona, superficial y reaccionaria. Si ser “la expresión de la mujer en la noticia” parte de la absurda generalización de una mujer, sin conflictos de clase, es obvio que el feminismo para Cuestión será el tratamiento contra el hombre, igual de abstracto. Curiosa contradicción se da en este diario: por un lado, hay una búsqueda de apoyo y solidaridad masculina, y por otro, se plantean ciertos enfrentamientos con los hombres ya que, al no cuestionar el sistema, tienen una visión individualista del problema… Las feministas no creemos que todo lo que hacen las mujeres está bien hecho y todo lo que hacen los hombres está mal hecho…
Pese a esta fuerte y clara división entre las mujeres periodistas, intelectuales y feministas de la época. El espacio que abrió Cuestión resultó ser una oportunidad para que las mujeres mexicanas interesadas en el ejercicio periodístico lograran cubrir todas las fuentes informativas. Aspecto que en esa década todavía resultaba difícil para ellas desarrollar en otros periódicos como Excélsior y El Universal. Pese al gran apoyo que ya había recibido de El Día, con Enrique Ramírez y Ramírez, y en el diario Uno más Uno, donde ya destacaban por su labor periodística Sara Lovera, Blanche Petrich y Carmen Lira.
En el periódico se informaba cotidianamente de los sucesos noticiosos desde el ámbito político hasta el cultural. Sus opiniones sobre la situación política del país fueron desde diversas posturas. Si bien reconocían avances y compromisos, también tuvieron la perspectiva crítica latente. época: “de rodillas, con los brazos en cruz e implorando ser independizada de los mexicanos”.
Al informar sobre cuestiones relacionadas a la condición femenina, el periódico mostró una visión conservadora. Pero también destellos feministas. Un ejemplo fue su postura en torno al aborto. A lo largo de 1980 se insertaron diversos artículos donde las argumentaciones intentaban persuadir que abortar era sinónimo de asesinar. Aunque también se mostraron otro tipo de posturas, más cercanas a la esencia feminista. Susana Vidales advirtió que con posiciones a favor y en contra, se había dejado fuera del debate la postura feminista y que, si su propuesta se presentaba fuera de contexto, ello provocaba confusiones. Por lo que propuso retomar el análisis feminista y examinar con precisión lo que las feministas presentaron a la Cámara de Diputados. La misma autora presentó una interesante crítica al peligro que el día de la mujer empezara a institucionalizarse en el inicio de la década de los ochenta:
El próximo sábado 8 de marzo se celebra el Día Internacional de la Mujer. No es una celebración institucionalizada por el comercio para vendernos más inútiles artículos, sino que se trata de una fecha de gran significación para las mujeres del mundo porque se recuerda la iniciación de las luchas contra la opresión y marginación femeninas.
Vidales evocó, que fue en 1926 cuando empezó a tomarse en cuenta ese día, pero que después de 25 años “el carácter combativo e internacionalista parecía ser poco compatible con la institucionalizada y “respetable” Revolución Mexicana”. La periodista destacó que ahora las feministas habían retomado esa tradición para volver a ese tono combativo que dio origen a esa fecha.
Estas posturas y contenidos caracterizaron a Cuestión, la expresión de mujer, y se mantuvieron hasta 1984, pues ese año se cambió totalmente de equipo y de perfil editorial. En una entrevista la periodista y feminista Guadalupe López García, obtuvo la siguiente declaración de Margarita Michelena:
Yo tuve un periódico, que se llamó CUESTIÓN, manufacturado por mujeres. No recuerdo el año. Fue traumático, convertirlo en un vulgar periódico de encueradas. Ahí se quedaron unas cuantas chicas, hasta que las aburrieron. Hubo chicas muy orientadas, pero todas se perdieron en las redacciones. Ahora es un periódico vulgar… CUESTIÓN significó mucho en mi vida, más que haber participado en Radio Femenina, quizá por el amor desmesurado al periodismo escrito.
Sin duda, Michelena marcó una pauta en el periodismo del país y desde su postura abrió un espacio de información y opinión que dio a su manera la voz a las mujeres mexicanas.