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JUAN CHÁVEZ. La jefa de Gobierno de la CDMX envió una ‘sincera y sentida disculpa’ a las familias afectadas del Colegio Rébsamen al entregar el memorial para ‘honrar y rendir homenaje’ a las víctimas.
Pasaron más de cinco años para que familiares de los 19 menores de edad y siete adultos que perdieron la vida por el colapso del colegio Rébsamen, recibieran por parte de las autoridades de la Ciudad de México y federales una disculpa pública por los agravios causados por la tragedia del sismo del 19 de septiembre de 2017.
Una disculpa no es suficiente para familiares de víctimas del Rébsamen. A pesar del acto solemne, los familiares de las víctimas reprocharon a las autoridades capitalinas por las omisiones que llevaron a la tragedia del 19 de septiembre de 2017.
Y en esas omisiones por parte de los que fueron jefes de Gobierno –Marcelo Ebrard y Miguel Ángel Mancera y la propia Sheinbaum que fungía como alcaldesa de Tlalpan—se esconden los orígenes de la tragedia.
Sheinbaum hizo de su discurso la narrativa de las fechas de la historia negra de la tragedia, al citar inclusive los años de omisiones y complicidades de las autoridades, para que el cuarto piso del Colegio Rébsamen subsistiera hasta que el terremoto de 2017 lo derrumbó.
La dueña del colegio, Mónica García Villegas, que vivió en el cuarto piso, fue sentenciada a 36 años, cuatro meses y dos días de prisión por homicidio culposo, por lo que fue recluida en el penal de Santa Martha Acatitla y el director de obras está sentenciado a 208 años de prisión.
Hay otros dos directos responsables, uno está bajo proceso; el otro anda en fuga.
Su discurso fue expresión de cinismo, pues ella ha sido el mayor dolor de cabeza del presidente. Y tan lo sabe, que ayer desparramó supuesto dolor al ofrecer disculpas a los padres de familia del Rébsamen. ¡Con qué cara, si ella era la alcaldesa y su hoy contralor era el abogado de los padres que se quedaron sin sus hijos, a quienes abandonó por irse al gobierno de la regenta! ¡Así la calidad moral de ambos!
Al pie del memorial en honor de las 26 víctimas mortales, construido en la Alameda Sur, ubicada en la alcaldía Coyoacán y no en Tlalpan, donde ocurrieron los hechos, un centenar de familiares, de los menores y profesores que fallecieron, acudieron a un acto convocado por autoridades capitalinas y federales para dar cumplimiento a la recomendación 31 VG/2019 emitida por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Sheinbaum dejó claro que los permisos otorgados por la entonces jefatura delegacional de Tlalpan en 2008, fue la encargada de autorizar la construcción de un cuarto nivel en el colegio Rébsamen. El colapso de las instalaciones se debió en gran parte al departamento de la dueña y directora del colegio Mónica García Villegas, ya que había ampliado y construido un piso de más de 230 toneladas, que al final los cimientos no soportaron.
En el historial que presentó la jefa de Gobierno, citó el año 2010 en que autoridades identificaron la irregularidad, por lo que se determinó la clausura del cuarto piso y se exigió la demolición de dicho nivel. Esa demolición nunca se llevó a cabo.
Siguió su relato: “Dos años después, en 2012, la propietaria del inmueble presentó un aviso de obra para continuar con la construcción del cuarto piso, la cual fue declarada improcedente.
Autoridades llevaron a cabo una visita de verificación en 2013. Meses después, en 2014 se ordenó, otra vez, clausurar la obra. Adicionalmente se sancionó con multa. Sin embargo, para diciembre de 2014, se retiraron los sellos de clausura.
A principios de septiembre de 2017, antes de los sismos, el Colegio tenía permisos y autorizaciones. Por lo anterior, el 28 de septiembre de 2017 -después del sismo-, la entonces alcaldesa Claudia Sheinbaum presentó una denuncia penal y entregó la información a las autoridades correspondientes para seguir con la investigación.
“La indignación viene de lo que todos nos preguntamos: ¿cómo tenían documentos que afirmaban que el inmueble estaba en regla? Negligencia, corrupción de responsables de obra y por diversas autoridades que hoy están sancionadas”, destacó Sheinbaum.
Su minucioso relato, en un acto de solemnidad para los familiares de las víctimas, resultó un ponzoñoso discurso de campaña, en su aspiración por el 2024. No hay duda, lo dirigió contra Marcelo Ebrard, jefe del Gobierno en los años previos de la tragedia.
