ANÁLISIS A FONDO/ Universitarios maltratados y amenazados

>> La Universidad Tecnológica de la Selva en Paro Laboral

>> Exigen justicia y los amenazan con rescindir su contrato

FRANCISCO GÓMEZ MAZA. El presidente Andrés Manuel López Obrador, la secretaria de Educación Pública, Delfina Gómez Álvarez, y el gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón Cadena enfrentan, desde las 6 horas del 24 de mayo el primer conflicto laboral en una pequeña, pero trascendental universidad establecida en la puerta de la selva lacandona, la ciudad de Ocosingo.

Los docentes y administrativos de la Universidad Tecnológica de la Selva, aglutinados en un sindicato, declararon el paro tanto en su sede como en sus unidades académicas. La causa: Los sindicalistas acusan al rector Dr. Eduardo Raymundo Garrido Ramírez de violación del contrato colectivo de trabajo.

Con un cuarto de siglo de vida, la UTS es una institución de educación superior que significa una gran oportunidad de desarrollo para los habitantes de la zona selvática de Chiapas, integrada por grupos indígenas de diversas etnias mayenses, que se establecieron en la región desde la década de los 70 aproximadamente.

Hasta el momento, después de una semana de paro, los docentes y administrativos de la UTS sólo han recibido amenazas de parte de la rectoría encabezada por Garrido Ramírez.

Los sindicados alegan que siempre han privilegiado el quehacer académico y la formación profesional de calidad para los estudiantes. Dicen que han fomentado la comunicación y el diálogo con las autoridades universitarias para tener encuentros y coincidencias que permitan el desarrollo de la UTS. Sin embargo, la administración de la casa de estudios no ha demostrado, ni tampoco ha existido, la mínima intención de trabajar bajo el mismo tenor.

Los profesores y trabajadores administrativos no tienen a quien acudir. El rector los amenaza con descontarles las jornadas no trabajadas desde que estallaron el paro de labores, y de expulsarlos de su puesto de trabajo; el gobernador obviamente apoya a las autoridades académicas y administrativas – a quienes, por cierto, los miembros del SAYAUTS acusan de ganar sueldos tan abultados como el que obtiene en presidente López Obrador- y si no tienen apoyo de Escandón Cadena, menos lo tienen de las secretarías de Educación Pública estatal y federal. La secretaria Delfina Gómez Álvarez ni siquiera se ha enterado del conflicto. O no lo ha atendido.

El rector Garrido Ramírez tiene aparentemente la sartén por el mango. Asegura que, “al no existir sustento legal el paro de labores es ilegal a todas luces, por lo que se les hace una atenta invitación (a los paristas) para reanudar las actividades académicas… las cuales fueron interrumpidas por los agremiados del Sindicato de Académicos y Administrativos de la Universidad Tecnológica de la Selva, para presionar a las autoridades a atender sus demandas,

Los académicos y administrativo declararon en paro de labores en la institución para denunciar “la mala administración de la Alta Dirección Actual, presunto nepotismo, salarios tan altos, comparables con el del Presidente de la República, hostigamiento laboral e incumplimiento del contrato colectivo de trabajo, del cual el SAYAUTS tiene la titularidad como sindicato mayoritario.

Ha denunciado los sindicados que les es imposible quedarse de brazos cruzados, “mientras que la UTSelva se convierte en un negocio familiar con nóminas exuberantes, que deberían representar vergüenza, cuando los alumnos de la universidad no tienen las condiciones mínimas necesarias para llevar al cabo su formación académica de manera adecuada. La inmensa mayoría de los estudiantes de la UTS son hijos de familias indígenas de muy escasos recursos económicos además de ser sujetos de explotación, exclusión, racismo por los llamados caxlanes, caciques ricos.

Hasta el momento – lunes 30 de mayo- no ha habido acercamiento entre trabajadores y rectoría de la Universidad. Lo que ha habido son intimidaciones y amenazas del rector de que se les quitarán el sustento para sus familias, “comprobando así la forma de trabajar del Dr. Eduardo Raymundo Garrido Ramírez y de sus exageradamente bien remunerados colaboradores. El funcionario ya les informó a los académicos y administrativos que “para la segunda quincena de mayo se procederá a realizar el pago correspondiente únicamente por los días laborados.  Y que “se procederá a realizar la rescisión de la relación contractual correspondiente”

La organización sindical envió una carta al gobernador Escandón Cadena en la que le detallan sus peticiones y las causas por las que entraron en paro de labores.

Sin embargo, aunque el documento tiene los sellos de 8 dependencias receptoras del mismo en palacio de gobierno, el gobernador no ha dado ninguna muestra de haber recibido los reclamos del sindicato de la Universidad de la Selva.

Obviamente, los profesores, las profesoras, los trabajadores y las trabajadoras de la administración universitaria necesitan que los vea el mismo presidente Andrés Manuel López Obrador, en quien aún confían. De otra suerte, su presente es angustiante y su futuro absolutamente incierto. Y con su suerte, peligra indubitablemente la de la Universidad Tecnológica de la Selva y la única oportunidad de estudiar una carrera universitaria para los hijos de las familias indígenas de la única zona selvática que va quedando en la geografía mexicana, en donde aún el día de hoy los niños mueren de enfermedades curables, aunque usted no lo crea.

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